Una colección de la mítica revista Cahiers du cinéma Explora la filmografía de 10 directores y consolida un canon.
Si bien la preeminencia de la figura de director quedó instalada, su verdadero control sobre el producto terminado es endeble y merece ser discutido.
A partir de los Cahiers, también, se afianza la idea de leer la obra de un director en terminos de filmografía.
Siguiendo a Burello, “si uno quiere preguntarse dónde está el autor, lo va a encontrar en la continuidad de algunos elementos estéticos y de contenido que se van dando a lo largo de sus películas. Aparece con eso la idea filmografía: esos directores, dicen los críticos franceses, tienen una filmografía. Es decir: hay un dibujo que se arma si uno va uniendo sus distintas películas. Eso es el comienzo de la teoría del cine de autor. Hoy esa teoría ha sido llevada a una exageración donde lo que hay es la búsqueda a todo precio de un autor”.
Desde la fundación de los Cahiers hasta ahora, las cosas han cambiado mucho. En aquel momento los directores a instalar eran Nicholas Ray, Fritz Lang, Howard Hawks y, sobre todo, Hitchcock; tipos que la industria había confinado a la categoría de meros empleados que producían una película entretenida por año. Ahora, con el paso de las décadas, estos cuadernillos incorporan una nueva serie de directores: Woody Allen, Pedro Almodóvar, Tim Burton, Coppola, Clint Eastwood, Kubrick, Lynch, Scorsese, Spielberg... Si en la década del sesenta la cinematografía de estudios estaba languideciendo para dar paso a las películas “de autor”, esta nueva camada –muchos de ellos artífices del american new wave – ya nació con el chip incorporado de la película como hecho estético.
Silvia López
No hay comentarios:
Publicar un comentario